Las tendencias actuales de búsqueda del desarrollo sostenible en la Región Mediterránea se están dirigiendo cada vez más hacia un enfoque integrado que combine los intereses medioambientales con los económicos y los sociales. Las empresas, entre ellas las mediterráneas, se consideran actores principales de la “alfombra roja” hacia el desarrollo sostenible, que sólo se podrán alcanzar aquellar que logren combinar los tres factores.
La producción más limpia puede verse como la implementación de un grupo de técnicas, tecnologías y procesos de gestión para prevenir los impactos negativos en el medio ambiente y generar a la vez valía económica.
Se trata de una estrategia “win-win” resultante de la adopción de métodos de producción que mejoren la productividad y a la vez reduzcan el consumo de recursos naturales y, consecuentemente, incrementen los beneficios: reduciendo costes, incrementando el beneficio, mejorando la calidad de los productos, transformando productos y descubriendo nuevos bienes y servicios e, indirectamente, reduciendo los riesgos del incumplimiento de la normativa.