Pasta
- En el Mediterráneo tenemos la capital mundial de la pasta, Italia sin duda, de dónde parece que es originaria, pese a que algunos dicen que la introdujo Marco Polo cuando volvió de Oriente, en el siglo XIII. En una tumba etrusca se han encontrado utensilios que probablemente utilizaban para hacer pasta. En un libro romano del siglo I a.C. se hablaba de la lasaña. En 1150 había una fábrica de pasta seca en Palermo que distribuía espaguetis a los mundos árabe y cristiano.
- Los cereales fueron lo primero que se cultivó en Oriente Medio. En árabe cereal se dice neama, que quiere decir providencia, y en los rituales religiosos simbolizan la prosperidad. En Túnez, si un niño tira un trozo de pan al suelo lo ha de recoger, darle un beso y acercárselo a la frente en señal de respeto. Desde siempre han sido fundamentales no sólo para el nutrimiento sino también en la evolución cultural: los primeros alfabetos y sistemas de numeración aparecieron para llevar la contabilidad de las cosechas y distribuirlas entre la población.
- Si bien la pasta se popularizó desde Italia hacia toda la orilla norte mediterránea (una expansión que comenzó ya con el Imperio Romano), a orillas del sur sigue siendo mayoritario comer el trigo a partir de las formas del grano de trigo poco o nada elaboradas, como la sémola, el cuscús, el bulgur o el mhamsa. En todas las casas de pueblos y ciudades hay una buena despensa dónde guardarlas. Así, de entre los 50 países donde se come más pasta por habitante sólo hay nueve de mediterráneos, principalmente de la orilla norte (a excepción de Túnez); una gráfica con el consumo de cuscús por habitante tendría un aspecto muy diferente.
- Actualmente Italia es el primer productor de pasta del mundo, seguida de cerca por los Estados Unidos. Exporta poco más de la mitad de su producción.
10/06/2010 - 19:19